
Retrato de Julio Verne
Óleo sobre lienzo, alrededor de 1875
MJV C530
Julio Verne, con alrededor de 45 años, aparece representado en el culmen de su carrera, en el momento en que La vuelta al mundo en 80 días triunfaba en el teatro, tras haber cosechado un éxito arrollador en las librerías, y que se publicaba La isla misteriosa.
Este retrato nos brinda la oportunidad de descubrir los reflejos rubio-rojizos de su cabello y su barba, antes de que pasasen a la posteridad canosos por el paso del tiempo.

Silla que perteneció a Julio Verne
Procedente del mobiliario del comedor del 2 rue Charles-Dubois en Amiens
MJV G167
La hora de la comida era un momento crucial para Julio Verne.
Desde sus primeros años de juventud en París, sufría trastornos alimentarios y dolores de estómago agudos y crónicos. Cuando alcanzó la edad madura y un nivel de vida acomodado, desarrolló una necesidad excesiva de comer, una forma de bulimia. Sin duda un síntoma de la diabetes que se cobraría su vida el 24 de marzo de 1905.
La cuestión de la alimentación fue una preocupación tal en la vida del escritor, que se refleja en su obra, en la que proliferan las alusiones a la comida, desde la agonía del hambre hasta los placeres convivenciales de la mesa.
Al deteriorarse su salud, el envejecido Julio Verne se limitó a una dieta estricta. Según su nieto, Jean Jules-Verne (1892-1980), fue en esta época cuando adoptó esta silla corta sobre patas. «¡Para abreviar la formalidad de la comida, utilizaba una silla baja que situaba el plato casi a la altura de su boca!»

Bustos de Julio Verne
Fabio Stecchi
Terracota, 1882
MJV G317
Albert Roze, según Fabio Stecchi
Mármol, 1906
MJV G244
El busto de mármol de Julio Verne, ejecutado por Albert Rozem, no se realizó en vida del autor. Esta pieza data de 1906 y lleva la inscripción «Albert Roze según Stecchi».
Albert Roze se inspiró en una obra del escultor Fabio Stecchi: este busto de terracota de Julio Verne, realizado del natural en 1883, se expuso en el Salón de los Artistas Franceses de París ese mismo año.
Las esculturas de Fabio Stecchi y Albert Roze representan un retrato de Julio Verne, cortado por los hombros, con la cabeza girada tres cuartos y la barbilla ligeramente erguida; digna y elegante. En 1883, Fabio Stecchi captó la fisionomía de un hombre que por aquel entonces tenía 55 años y se encontraba en el culmen de su gloria.
Esa solemnidad es la que Albert Roze recrea en este busto de mármol, como en el que realizó poco después para un monumento erigido a la gloria de Julio Verne en Amiens.

Copas de champán MJV G105
Platos decorados con el monograma «JV» MJV G108
Fruteros decorados con el monograma «JV» MJV G104
Tazas y platillos de café MJV G106
Servicio de licores MJV G107
Cubiertos de servicio MJV G236
En el 2 rue Charles-Dubois de Amiens, la mesa está puesta. Julio Verne solo salía de su estudio situado en el piso superior de la casa para bajar a la planta baja y dirigirse al comedor a la hora de comer, con el fin de saciar su voraz apetito. Cuenta su nieto que «durante años, comió cada noche seis enormes alcachofas de los hortillonnages de Amiens» (espacio de antiguos pantanos situados en el barrio este de Amiens, concebidos para crear campos destinados al cultivo hortícola), Jean Jules-Verne (1892-1980). Julio Verne comía de manera más bien compulsiva, sin paladear los manjares.
Así que los platos que cocinaba su esposa Honorine Verne, famosa por ser una excelente cocinera, solían deleitar más bien a los invitados, notables de Amiens, a los que disfrutaba recibiendo. Cuando la glotonería de Julio Verne no arruinaba sus esfuerzos… «Me han contado extraordinarias historias de una pata de cordero que devoró mientras esperaba a unos invitados que llegaban tarde, y de un asado del que solo dejó las migas.»
Sin duda, Julio Verne prefería la compañía de los periodistas con los que se reunía en su casa, a la de la alta sociedad. Estos periodistas eran Adolphe Brisson, Marie Belloc, Edmondo de Amicis, Robert Sherard,… Venían de Francia, Inglaterra, Italia, Alemania y América para entrevistarse con el ya famoso autor de los Viajes extraordinarios, que por aquel entonces tenía unos sesenta años.
Numerosos momentos de la intimidad de Julio Verne de los que, quizás, los platos, las copas de champán y las tazas de café hayan conservado su impronta en el cristal y la porcelana…
en los cajones

Julio Verne
Carta enviada a M. Alliou
Amiens, 28 de marzo de 1883
MJV B153
En una carta enviada a M. Alliou, un empleado de la editorial Hetzel con el que Fabio Stecchi se alojó durante sus estancias en París, Julio Verne escribió:
« En los próximos días recibirá una caja con el busto que Stecchi hizo de mí. Le envío esta caja a petición del Sr. Hetzel, y Stecchi tomará las medidas necesarias para que llegue a tiempo al salón en el que se expondrá el busto.»
Edmondo De Amicis, periodista italiano
Memoriae, «Una visita a Jules Verne»
Éditions Treves, Milán, 1904
MJV A1122
«Acudimos a reunirnos con Julio Verne en Amiens. Allí es donde vive todo el año, a dos horas y media de París en tren. […] Julio Verne apareció inmediatamente. Sonrió y nos tendió la mano. […] Tiene casi ochenta años y no los aparenta. […] Tras el placer de verlo, mi primera impresión fue de asombro. Salvo por una aparente amabilidad y un trato afable, no encontré nada en común entre el Verne que tenía ante mí y el que me había imaginado hasta ese momento.»

Julio Verne
Poema enviado a su madre, Sophie Verne
[Nantes, 1842]
MJV B272 – Manuscrito original

Julio Verne
Carta a su padre, Pierre Verne
[París, 1851]
MJV B33 – Manuscrito original
«Mi trabajo avanza, pero no hay nada terminado.
Esto es lo que ocurrió. Por mediación de Arago, conseguí una entrevista con Mo[c]ker, uno de los mejores actores de la ópera cómica y director de escena. Yo le leí el libreto y quedó literalmente encantado».
El Hombre detrás del escritor
A lo largo de su vida, Julio Verne mantuvo vínculos muy estrechos con sus padres, su hermano y sus hermanas. En su estilo espontáneo, a veces burlón, sus cartas les hablan de su predisposición hacia la escritura, de sus primeras oportunidades profesionales, del progreso de sus proyectos literarios, que compartía de buen grado con su familia, y de las etapas más personales de su vida.

Julio Verne
Carta dirigida a su madre, Sophie Verne
Amiens, noviembre de 1856
MJV B228 – Manuscrito original
«¡No estás acostumbrada a que haga elogios generales de toda una familia y tu perspicacia materna va a hacerte sospechar que tras ello se ocultan otras razones! ¡Creo que estoy enamorado de la joven viuda de 26 años! ¡Ah! ¿Por qué tiene dos hijos? No tengo suerte, siempre me topo con algún obstáculo.»

Julio Verne
Carta a su padre, Pierre Verne
Membrete del banco Fernand Eggly, París, 10 de marzo de 1868
MJV B257 – Manuscrito original
«Me encuentro inmerso en Le Voyage sous les eaux (Viaje bajo las aguas), que en realidad se titulará Veinte mil leguas de viaje submarino. Para mí es un gran placer trabajar en él, y espero que lo encuentres muy interesante. Dentro de tres o cuatro meses, cuando lo tenga corregido, intentaré enviaros a ti y a Paul el primer volumen para que podáis limar posibles errores o imperfecciones. Realmente quiero que esta máquina sea lo más perfecta posible.»

Julio Verne
Carta enviada a su hermano, Paul Verne
Membrete de la Société industrielle d’Amiens
Amiens, 7 de septiembre de 1894
MJV B167 – Manuscrito original
«Te envío hoy la primera prueba de galera de La isla de hélice. Después de leerlo, Hetzel me dijo: «Es realmente original, ¡y has abordado el tema desde una perspectiva que para cualquier otro resultaría un gran atrevimiento, pero no para ti!». Veremos si tú opinas lo mismo. Te lo envío para que puedas hacer cuantas observaciones consideres en la página en blanco, en la que tendrás espacio. Ya veremos lo que opinas de todo el tema mecánico.»

Julio Verne
Carta dirigida a su hermana, Marie Guillon-Verne
Amiens, 17 de diciembre de 1899
MJV B306 – Manuscrito original
«En cuanto a ir a Nantes en primavera, eso es otro tema, y pareces olvidar que para entonces tendré 73 años. ¡Sí! Así son las cosas. Y no solo soy un viejo, soy un viejo que se acuesta a las 8 de la tarde y que no va a ninguna parte. Gracias de todos modos por tu invitación»

El baile de disfraces de D. Julio Verne
Dibujos de M. Vierge a partir de un boceto de M. Materre
Le Monde Illustré, 14 de abril de 1877
MJV C116
El 2 de abril de 1877, Julio Verne y su esposa Honorine organizaron un baile de disfraces en Amiens: «El lunes de Pascua celebramos un baile de disfraces. Hemos enviado 700 invitaciones de las que al menos se confirmaron 350. Toda la ciudad está alborotada». La recepción tuvo lugar en los salones Saint-Denis, magníficamente decorados para la ocasión. Muchos de los invitados se inspiraron para sus trajes en los personajes de los Viajes extraordinarios.

Gédéon Basil
Grrrrandre auberge du tour du monde (Grrrrande albergue de la vuelta al mundo)
Cartel, Amiens, 1885
Impresión de exposición (Biblioteca de Amiens Métropole)
El 8 de marzo de 1885, Julio Verne se presentó con su librea de cocinero para dar la bienvenida a sus invitados al baile de disfraces en su casa de Amiens. El tema: ¡los viajes! Para la ocasión, la casa del 2 rue Charles Dubois se transformó en una «gran posada de la vuelta al mundo». Julio y Honorine se disfrazaron de posaderos, mientras que sus invitados llevaban trajes tradicionales de todo el mundo.

Tarjeta de visita firmada por Julio Verne
Finales del siglo XIX
MJV B1

Postal dedicada por Julio Verne a la señora condesa de [Franclieu]
1903
MJV B2

Julio Verne
El desierto de hielo, Aventuras del capitán Hatteras
Éditions Hetzel, París, alrededor de 1865
MJV A4908
Esta obra, con una dedicatoria del puño y letra del autor, se envió a la Biblioteca de Nantes: «En homenaje a la Biblioteca de Nantes, Julio Verne».

Pierre Louÿs
Notas grafológicas
Finales del siglo XIX – principios del siglo XX
MJV B232
Pierre Louÿs, poeta, novelista y aficionado a la bibliografía, escribió miles de notas de trabajo. Cuatro hojas de estas notas estaban dedicadas a un estudio grafológico de Julio Verne. Esta técnica de análisis caligráfico pretendía deducir las características psicológicas de una persona. Esta disciplina se desarrolló en el siglo XIX y se desarrolló hasta mediados del siglo XX en Europa y Estados Unidos.
Según las notas de Pierre Louÿs, su estudio de la escritura de Julio Verne describe las intenciones del escritor como cuidadosamente meditadas, ofensivas y revolucionarias, perseverantes, pero también discretas: «la « e » final de la firma resulta especialmente reveladora del pensamiento íntimo».
Aunque tal diagnóstico nos desvela que el propio Julio Verne poseía algunas de las virtudes heroicas con las que caracterizaba a sus personajes principales, también nos sugiere que era un hombre muy «reservado» que guardaba para sí sus pensamientos íntimos.

Pensamientos de Cicerón
Traducción del abad de Olivet
Piget, París, 1747
MJV A5932
En esta obra redactada en latín y francés, Julio Verne escribió unas cuantas notas. La primera hace referencia al teatro: «En la Tragedia, lo Cómico tiene un efecto negativo: y lo Trágico no funciona mejor en la Comedia».

Homenaje a Julio Verne
Acrílico sobre lienzo, 2005
MJV C349
Tríptico pintado para el salón internacional de ciencia ficción Utopiales (Nantes, noviembre de 2005) por iniciativa de Gilles Francescano, presidente de Art&Fact, por Thierry Cardinet, Sandrine Geslin, Didier Graffet, Hubert de Lartigue, Manchu y Pascal Yung, para ser donado al Museo Julio Verne. Recurriendo a su propio imaginario para plasmar el mundo de Verne, sus autores reproducen el gran poder de inspiración intacto del novelista de Nantes.